La búsqueda de la Verdad y la aproximación a la lógica en los personajes de la novela El Nombre de la Rosa
Estefanía Cárdenas.
se han dado pequeñas aproximaciones, acerca de los personajes de la novela y su trama en relación con algunos filósofos y teorías de la época. Además de reflexionar en torno al tema de la búsqueda de la Verdad, la racionalidad, la lógica, pero además la importancia de la justicia y el humanismo.
El presente artículo aborda la representación de ideas filosóficas a través de los personajes principales y la trama literaria de la novela El Nombre de la Rosa del escritor, filósofo y semiólogo, Umberto Eco.
La historia inicia cuando los monjes Guillermo de Baskerville y Adso de Melk, son invitados con la misión de resolver misteriosas muertes en una enigmática Abadía en el norte de Italia en la Edad Media, durante la Inquisición.
En un lugar entre Sherlock Holmes, Aristóteles y Guillermo de Ockham, se encuentra Guillermo de Baskerville. Es un monje franciscano de aproximadamente 50 años, ex inquisidor, con una mente aguda y racional, además de una gran seguridad en sus propias capacidades. Su trayectoria y experiencia junto con su erudición le otorgan una mirada compleja de cómo funciona la sociedad monástica de la época (Eco, 1980).
Junto con Guillermo de Baskerville se encuentra su pupilo Adso de Melk, un joven novicio benedictino alrededor de 20 años, de cabello oscuro y expresión reflexiva. Es observador, sensible y reflexivo. Él es quien narra la historia con una profunda curiosidad por los eventos, guiado por el mundo que está descubriendo. Bastante ingenuo e inexperto, gana sabiduría a medida que trascurre los días y las experiencias en la Abadía (Eco, 1980).
Guillermo de Baskerville, está invitado a resolver un misterio en una misteriosa Abadía Benedictina llamada Abadía de Melk, en el norte de Italia en 1327, durante la Edad Media.
Antes de entrar a la Abadía Eco, presenta a Guillermo de manera que se descubre su agilidad racional: comprendió que andaban buscando el caballo del Abad, su nombre, a quien pertenece y su ubicación, únicamente mediante la observación de sutiles pistas, las cuales le lleva a una conclusión precisa, utilizando la inducción a través de un silogismo categórico para llegar a un conclusión general (Aristóteles, 1988).
Pero lo que encuentran ambos personajes es un desafío mayor, puesto que deben resolver una serie de muertes, todas ellas envueltas en supersticiones. Las historias entorno a estos hechos dificultan descubrir porqué y quién es el autor de las misteriosas muertes en la Abadía (Eco, 1980).
Guillermo de Baskerville y Adso de Melk se enfrentan al primer misterio importante: Han encontrado muerto de un monje por un aparente suicidio.
Eco da una descripción de la primera muerte misteriosa:
Adelmo da Otranto, monje aún joven pero ya famoso maestro en el arte de la miniatura, que estaba adornando los manuscritos de la biblioteca con imágenes bellísimas, había sido hallado una mañana por un cabrero en el fondo del barranco situado al pie del torreón este del Edificio (Eco, 1980, pág. 26).
Entorno a esta muerte, Guillermo inicia una entrevista con el Abad, líder religioso de la comunidad monástica en la cual han sido invitados. Guillermo busca la explicación más simple y siempre basándose en las evidencias: La teoría del suicidio se vuelve compleja y difícil de explicar al encontrar cerradas las ventanas desde donde pudo haberse caído.
Guillermo de Baskerville descarta la teoría de un suicidio y señala que dadas las circunstancias y habiendo falta de otras pruebas que respalden esta suposición, una teoría más sencilla es suponer que fue empujado.
Su razonamiento sigue un principio filosófico denominado La Navaja de Occam, conocido también como principio de parsimonia o simplicidad. El principio de Occam prefiere una explicación que requiera menos suposiciones:
“No multipliquemos entes sin necesidad, no hagamos con mucho lo que se puede hacer con poco” (Duque, 2021, pág. 334).
Se conoce este principio como La Navaja de Occam porque se le atribuye al filósofo y fraile franciscano Guillermo de Ockham, quien vivió en un punto del siglo XIV, sin embargo según lo que sostiene el actualizado investigador de la Universidad Pontificia Bolivariana, Nicolás Duque Naranjo; el principio fue original de Empedoclés, retomado por Aristóteles y versionado con mayor popularidad por Guillermo de Ockham.
Sin detenernos más en el verdadero origen de mencionado principio, las muertes en la Abadía seguían ocurriendo, una detrás de otra sin explicación, lo que desencadena una pesquisa más compleja por parte de Guillermo, esta vez ya no para descartar un suicidio, sino para encontrar al asesino y la causa de estas muertes.
A medida que avanzan en su investigación, encuentran numerosos desafíos, como la resistencia de las autoridades eclesiásticas y la Inquisición. En este punto encontramos un análisis histórico acerca de los debates filosóficos de la época en la que está ambientada la novela desarrollada con detalle por la filóloga Annunziata Rossi, en un fascinante artículo que ilustra el contexto histórico y político de la obra.
En mencionado análisis subrayo la postura nominalista que adquiere Guillermo de Baskerville, al considerar la experiencia cómo lo verdadero, una idea que enfrentó a la Inquisición, mayormente basada en dogmas e intereses de poder, mediante los cuales se condenaban injustamente a supuestos herejes y brujos sin pruebas ni oportunidad de defenza. (Rossi, 2018).
A medida que avanza la novela, los misterios se acercan cada vez más a la biblioteca en dónde un viejo monje ciego, llamado Jorge, es el custodio de un misterioso libro: la Seunda Parte de la Poética, libro ficticio, conocido como La Comedia.
Concluyo, sin agregar más detalles de la trama, y subrayo que en esta novela se pueden encontrar grandes conocimientos filosóficos además de una historia apasionante, un sinnúmero de referencias filosóficas, teológicas e históricas.
En el presente artículo se han dado pequeñas aproximaciones, acerca de los personajes de la novela y su trama en relación con algunos filósofos y teorías de la época. Además de reflexionar en torno al tema de la búsqueda de la Verdad, la racionalidad, la lógica, pero además la importancia de la justicia y el humanismo.
Estefanía Cárdenas.
Bibliografía:
- Eco, U. (1980). El Nombre de la Rosa. Barcelona: LUMEN.
- Duque, N. (2021). Naranjo. Revista Filosofía UIS, 334.
- Rossi, A. (2018). Siete crímenes y una biblioteca en llamas. El nombre de la rosa de Umberto Eco. Acta Poética, 1.
- Aristóteles. (1988). Organon. Madrid: Biblioteca Clásica GREDOS.
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